En Solunion brindamos soluciones que se adaptan a las necesidades de cada empresa, con independencia de su tamaño, de su sector de actividad o del mercado en el que operen. Además, contamos con el respaldo Allianz Trade, uno de nuestros dos accionistas junto a MAPFRE, para las multinacionales desarrollando los programas multinacionales (ATM).
Detrás de cada póliza contratada hay un modelo de servicio completo y especifico adaptado a cada empresa, por eso en Solunion los equipos de cada una de las áreas estamos especializados en nuestras funciones para garantizar una correcta experiencia al cliente.
Dentro de todas ellas, el área de siniestros es fundamental, ya que desde allí validaremos los siniestros presentados por el cliente velando por el cumplimiento de las condiciones pactadas para asegurar que la indemnización se produzca en los tiempos establecidos.
Ser Técnico de Siniestros no es solo procesar reclamos; es ser el puente entre una empresa que atraviesa un desbalance en sus finanzas (deudor) y la solución que necesita nuestro asegurado para recuperar su impago. Cada día trae nuevos retos, pero también una gran satisfacción por el impacto positivo que podemos generar en la vida de nuestros clientes.
El rol de un Técnico de Siniestros implica analizar en detalle las circunstancias de cada caso, asegurando de que toda la documentación esté completa y en orden. Es un proceso meticuloso, porque cada reclamo es único, y en cada uno de ellos hay personas que están buscando respuestas y tranquilidad.
Una de las responsabilidades de este rol es que los procesos estén avanzando según lo planeado. Esto incluye coordinar con los corredores, ajustar detalles en la base de datos y, sobre todo, revisar las pólizas para asegurar que cada caso se ajuste a los términos del seguro. La tecnología juega un papel fundamental ya que es una herramienta que permite tener acceso rápido a toda la información y garantizar que nada se quede atrás.
El trabajo de un Técnico de Siniestros no solo es técnico, también es relacional. A menudo, se reciben llamadas o correos electrónicos de los clientes, ya sea para actualizaciones sobre el estado de su reclamo o para aclarar dudas. Es en este momento cuando se demuestra lo que realmente significa brindar un servicio de calidad: estar disponible, ser claro y, sobre todo, mostrar empatía.
Después de atender a los clientes y hacer el seguimiento de los casos, llega la parte más técnica de la jornada: la evaluación final y la toma de decisiones. Aquí es donde se debe adentrar en los detalles más finos del caso. ¿Está todo en regla? ¿El siniestro está cubierto según la póliza? ¿Se han cumplido los criterios establecidos?
Otra función importante dentro del área de siniestros es trabajar de la mano de los “collectors”, que llevan el proceso de cobranza para cada uno de los siniestros. Esto demanda la responsabilidad de guiar, motivar y apoyar al equipo para que cada cobrador logre sus objetivos, manteniendo un equilibrio entre la eficiencia y el respeto por el cliente.
No se trata solo de cobrar, sino de hacerlo de manera que la relación con el cliente se mantenga en buenos términos, incluso cuando las circunstancias sean complicadas. Además, el rol debe incluir una excelente comunicación, pues es importante asegurar que todos entiendan las políticas, procedimientos y objetivos, y también la responsabilidad de resolver cualquier conflicto que pueda surgir.
Trabajar en el área de siniestros puede ser desafiante, pero también es increíblemente gratificante. Cada caso resuelto es una historia de éxito compartida, y el impacto de nuestro trabajo se refleja directamente en la tranquilidad y seguridad de quienes confían en nosotros.
Este artículo ha sido redactado por Stefano Bruno, Técnico de Siniestros en Solunion América Central y Caribe.
